El kWh es la unidad de energía que sale en la cuenta de la luz. Su precio depende de la tarifa contratada con la distribuidora y se reajusta por decreto (clientes regulados).
Las tarifas elegibles, según Decreto Nº 11T del año 2016, son BT1, TRBT2, TRBT3, BT2, BT3, BT4 y BT5.
Lo más común es la tarifa BT1 que paga por kWh de "electricidad consumida" e incluye cargos por energía (kWh) y por potencia (kW). El pago por electricidad resulta siempre mayor que el de las tarifas noBT1 (30% mayor en Santiago). Adicionalmente, la tarifa BT1 es la única que paga por "energía adicional de invierno" (EAI).
Con tarifa noBT1 se paga un precio menor por el kWh y se agrega un pago por potencia, que puede reducirse con un equipo autónomo de generación -ver kit sustentable y adicionalmente puede actuar como respaldo frente a fallas de suministro y apagones provocadas por "eventos extremos".
Las tarifas son precios de compra. Uno de los beneficios de la Ley 20.571 "de la generación ciudadana" es la venta de energía a la red pública (por ahora no se considera la venta de potencia).
Con tarifa BT1 el precio de venta es menor que el precio de compra. Con tarifa noBT1 los precios de venta y compra son iguales. Las tarifas de venta se llaman "tarifas de inyección".
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